"Si quieres hacer sonreir a Dios, cuéntale tus planes".

Alberto Ruiz-Gallardón acudió al programa 'Tengo una pregunta para usted' con los deberes hechos y no tuvo problema en zafarse con diestra de las pocas preguntas comprometidas que tuvo. Nada nuevo bajo el sol. Aunque afirmó que quiere que "Mariano Rajoy sea presidente del Gobierno", defendió la "ambición política", criticó a la Iglesia por dejar que haya "injurias y difamaciones" en su radio, la COPE, y puestos a elegir entre Esperanza Aguirre y Federico Jiménez Losantos, se quedó con la primera: "Soñar con Aguirre sería agradable".

El alcalde de Madrid no dio grandes titulares en una 'comparecencia' sin estridencias -salvo su crítica a la Iglesia-, muy lejano a ese "verso suelto" del PP que dijo ser antaño. Defendió la actual legislación sobre el aborto -"no comparto la propuesta de modificación" del PSOE-, evitó hasta el final 'mojarse' sobre a quién prefería de líder de EEUU, e hizo un alegato en contra de la asignatura Educación para la Ciudadanía y en favor de la objeción de conciencia. "En la escuela no se debe adoctrinar idelógicamente", afirmó.

Pero sí algo no consiguió el alcalde fue convencer a los entrevistadores escépticos con la política. Uno de ellos, que dijo ser "apolítico", le pidió un cigarrillo. "Lo siento, no fumo", respondió el alcalde. A otra de ellas, Malla, gallega, la invitó a coger confianza en los políticos. "Transformar la realidad es algo fascinante y apasionante, y eso es lo atractivo de la política, ¿por qué no viene a transformar la realidad con nosotros?", le ofreció. "No, gracias", le respondió la joven, bastante convencida de su rechazo.

El momento más tenso de la entrevista ciudadana -27 preguntas en apenas 80 minutos- fue sin duda cuando le preguntaron sobre Federico Jiménez Losantos y la querella que interpuso contra él, por la que el periodista fue condenado por un delito de injurias. "No me extraña que en una sociedad plural pueda haber gente que difame, pero me sorprende y me duele que esas injurias y difamaciones se produzcan desde la radio de la Iglesia", dijo el alcalde de Madrid.

"Yo hice lo que cualquier ciudadano tiene que hacer cuando es injuriado, acudir a los tribunales", afirmó el alcalde de Madrid, que justificó su decisión en que "es un injuria decir que los muertos en el 11 de marzo no me importaban y que con ello quería alcanzar fines políticos". Fue ahí cuando los músculos de la cara se le tensaron y apareció en sus ojos quizá el brillo previo a unas lágrimas.

Quedaba clara la respuesta a la pregunta posterior: '¿Qué prefiere, soñar con Aguirre o despertarse con Losantos?'. "Soñar con Esperanza Aguirre, sería un sueño agradable. Como lo otro no lo hago, no opino", respondió.

Sobre las inundaciones de los túneles de la M-30, indicó que se produjeron en "una situación excepcional", pero admitió un "fallo eléctrico" en las bombas de achique de los túneles. "A mi no me preocupa tanto la inundación. No me gusto que tardasemos tanto en vaciar el túnel por un fallo eléctrico en las bombas de achique. Hubo que hacerlo de forma manual. Es un fallo que corregiremos", afirmó.

Sobre las elecciones de EEUU, el alcalde, que apenas se mostró nervioso durante la entrevista -no se colocó las gafas con el dedo índice ni una sola vez- opinó que "gane quien gane" en noviembre "el cambio está garantizado" porque "ya se ha producido".

Defendió las virtudes de ambos evitando así elegir a un candidato favorito entre el demócrata Barack Obama y el republicano John McCain -provocando con su ambigüedad las risas del público en el estudio-, aunque pareció optar por este último no por valores políticos sino porque Obama "es senador por Illinois, donde está Chicago, que compite con Madrid por los Juegos Olímpicos de 2016". "No me pida que llegue más lejos", zanjó.

Durante su alocución, el primer edil defendió también la postura de José María Aznar en la guerra de Irak "por la información que entonces teníamos", afirmó que su "responsabilidad más importante" es conseguir los Juegos de 2016 para Madrid, y se posicionó en contra de la cadena perpetua como respuesta a cualquier delito, porque va "en contra de la Constitución y del principio de reinserción".

A continuación, y también a preguntas de ciudadanos, indicó que "la consulta de Ibarretxe es un intento de plantear una ruptura de la Constitución española" y arremetió contra el Gobierno central por no dar más financiación a los ayuntamientos ya que "se nos encargan tareas para los que no tenemos competencias ni financiación", como en Seguridad.

Sobre la manida pregunta sobre su futuro político -fue inquirido al respecto varias veces-, defendió a Rajoy "como el mejor de todos (en el PP) para una alternativa", pero luego sí desveló que "los planes son difíciles que se cumplan tal y como los teníamos previstos".

"Yo estoy ayudando a Rajoy porque creo que es la persona que mejor puede conectar con lo que quieren los españoles. Yo ayudaré al proyecto de mi partido", afirmó, para luego volver a jugar al despiste con un dicho de origen francés: "Si quieres hacer sonreir a Dios, cuéntale tus planes".

http://www.elmundo.es/elmundo/2008/09/15/madrid/1221512041.html?a=cfb556ba7a192cafb7bc9d7092d0fa0b&t=1221520596