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domingo, 24 de enero de 2010

Las lecciones de Massachusets


Ayer, por recomendación de un amigo, encontré esta revista digital que me ha resultado muy interesante www.semanarioatlantico.com

Como politóloga, siempre tengo que tener la vista puesta en EE.UU. pues desde hace muchos años las novedades en Ciencia Política y en el ejercicio de la política provienen en su mayor parte de allí.

Desde una postura eminentemente crítica observo el status quo reinante en la "política" española mientras que en EE.UU. desde hace algunos años se están produciendo fenómenos sorprendentes. Si ya fue realmente interesante la batalla en el partido demócrata entre Clinton y Obama ahora nos encontramos con el resurgir del partido repúblicano.

Reproduzco un gran artículo que debería sacudir las estructuras internas de nuestros partidos para adaptarse a los nuevos tiempos.

"Las lecciones de Massachusets" por Newt Gringrich.


Scott Brown dió un gran discurso después de una gran victoria.Brown es un candidato atractivo, articulado, muy trabajador y con mucho coraje.Tuvo el coraje de servir durante años en una pequeña minoría en la legislatura de Massachusetts.Tuvo el valor de servir durante 20 años en la Reserva del Ejército de Massachusetts, y convertirse en Teniente Coronel.Tuvo el valor de postularse para el asiento en el Senado que ningún republicano ha ocupado desde Henry Cabot Lodge Jr. en 1946 (en un estado donde el último senador republicano, Ed Brooke, fue elegido en 1972). Tuvo el coraje de llevar a cabo una campaña positivamente orientada en todos los aspectos (una lección que, después de esta victoria y de la de los gobernadores de Virginia y Nueva Jersey, todos los candidatos republicanos deberían aprender).Tuvo el coraje de seguir alegremente con su camioneta, a pesar del ridículo desprecio por parte del Presidente.“La tierra de los libres y el hogar de los valientes” (como sugiere nuestro himno nacional) tiene que surgir con valentía o no puede continuar siendo libre.La valentía de Scott Brown cambió la historia en la elección especial más trascendental de mi vida.El siguiente es un breve resumen de nueve lecciones fundamentales de la victoria de Brown.

Lección uno: Presenten candidatos en todas partes

La primera lección que los republicanos deberían aprender de la victoria del martes es que el GOP debe presentar candidatos en todas partes sin preocuparse de si el distrito usualmente elige a republicanos.En los últimos cinco días una encuesta ha mostrado a Tim Griffin ganándole al congresista titular del 2do distrito del congreso de Arkansas, Vic Snyder (demócrata), por 17 puntos.En Cincinnati, el ex congresista republicano, Steve Chabot, está arriba por 17 puntos sobre el demócrata que le ganó en el 2008, Steve Driehaus.En Michigan, el ex congresista republicano, Tim Walberg, está 7 puntos por encima del demócrata Mark Schauer, que fue el que lo derrotó en las pasadas elecciones.Hay momentos en que cambia la historia y el pueblo estadounidense decide mover las cosas. Este puede ser ese momento, y significa que los republicanos deben postular candidatos en todos los niveles y en todos los estados.

Lección dos: Ser positivo importa, y los republicanos del congreso deben tomar nota

En las tres campañas ganadoras (Virginia, Nueva Jersey, Massachusetts), el candidato republicano se ha enfocado en los problemas y ha dado un mensaje positivo. En estas campañas, los republicanos señalaron sus diferencias con los demócratas, siempre orientándolas a cuestiones de principios.El pueblo estadounidense está realmente asustado por la economía, el terrorismo, y la pérdida de honestidad y transparencia de su gobierno. Quiere un partido que trate de resolver las cosas que le preocupan y no un partido que se enfrenta negativamente a esas preocupaciones y las mantiene de esa manera.Un partido de alternativa puede lograr enormes victorias en 2010 y 2012. Un partido de oposición lograría muchas menos.

Lección tres: El Presidente Obama ha tenido dos malos aniversarios y ahora es momento de que piense sobre lo que ha estado haciendo

En el aniversario de su elección como presidente, hubo victorias decisivas para dos gobernadores republicanos, en estados que él había ganado.El miércoles fue el aniversario de su inauguración y la fecha en que un nuevo senador republicano llegaba a Washington para ocupar el asiento del ex senador Ted Kennedy. Y Brown lo dejó muy claro: “Es el asiento del pueblo”.El Presidente ya tiene una excusa para detenerse, reflexionar, recalibrar y aprender algunas lecciones dolorosas.No más tratos ni acuerdos en secreto.No más votos de la máquina Pelosi-Reid.No más estrategias únicamente de demócratas izquierdistas.Los líderes de la izquierda en la Cámara y el Senado seguramente odiarán tal cambio de rumbo y lucharían contra él.Por su parte, los demócratas moderados (y la mayoría de los estadounidenses) respirarían aliviados.

Lección cuatro: Los republicanos deberían demostrar que sí responderían a una actitud nueva, más moderada y más abierta del Presidente Obama, ofreciendo un nuevo comienzo en el tema de reforma de salud, y en otros retos fundamentales de Estados Unidos

Este es el momento adecuado para que los republicanos de la Cámara y el Senado ofrezcan reunirse con el Presidente y comenzar un nuevo proceso para reformar la salud.Esta oferta de trabajar juntos para ayudar a la nación sería bien recibida por el pueblo norteamericano y representaría un verdadero cambio: de ser el partido de oposición, pasaría a ser el partido que ofrece una alternativa.

Lección cinco: Los Tea Parties y el populismo son reales

El Movimiento Tea Party va a ser una fuerza importante en el 2010 y el 2012.Representa un verdadero levantamiento de los estadounidenses que están enfadados, asustados, y hartos de ambos partidos.No es casualidad que Scott Brown haya destacado su independencia varias veces en el discurso de su victoria. No fue una victoria republicana. Sólo el 12% de Massachusetts está registrado como republicano. Esta fue una victoria de la gente. Una verdadera alianza entre los republicanos, los independientes y los demócratas moderados.

Lección seis: las camionetas les ganan a los grupos de presión

Lo más extraño de la visita desacertada y de última hora que hizo el presidente Obama a Massachusetts, fue su fijación en la camioneta de Scott Brown.Franklin Delano Roosevelt, que era un auténtico aristócrata de Hudson Valley, habría entendido instintivamente que había que estar del lado de las camionetas. Bill Clinton quizá hasta hubiera llegado en camioneta.Sin embargo, el elitismo de la nueva izquierda del partido demócrata -el partido de la máquina de Obama, Pelosi y Reid- está tan enterrado y tan fuera de contacto con la población que no entendió lo que Scott Brown estaba haciendo.

Lección siete: la seguridad nacional importa

Andy McCarthy publicó un excelente artículo en el “National Review Online” donde examina el papel que tuvo la seguridad nacional en la elección.Todo estadounidense preocupado por nuestra seguridad en una era de terrorismo debería leer a McCarthy y mirar la campaña de Brown. Tengan la certeza de que la seguridad es un tema en el que sólo es posible ganar, y la izquierda está absurdamente del lado incorrecto: poniendo los derechos de los terroristas por encima de la protección de vidas estadounidenses.

Lección ocho: El Radicalismo secular significa pérdida, incluso en Massachusetts

El jueves antes de las elecciones, en uno de los momentos más extraños en su marcha hacia la derrota, la Procuradora General Coakley dijo en una entrevista de radio al hablar de las personas religiosas que se oponen a la píldora del día después que aunque “usted puede tener libertad religiosa… probablemente no debería trabajar en una sala de emergencia.”Mientras la izquierda se ha hecho más secular y más agresiva en su hostilidad hacia la religión, ha ido despertando mucha más oposición. Entre los católicos, evangélicos, mormones, y judíos ortodoxos, la posición de Coakley representaba una lucha contra la intolerancia religiosa que todos temen.Definir la conciencia y la religión como partes legítimas de los Estados Unidos es una gran posición triunfadora, y la campaña de Scott Brown tuvo un fuerte componente de defensa de la fe y la conciencia, incluso en Massachusetts.

Lección nueve: El pueblo estadounidense es soberano, y cuando sus líderes lo enfurecen, se levanta y los despide

Como fue con Jefferson, Jackson, Lincoln, el movimiento progresista (especialmente Theodore Roosevelt y Woodrow Wilson), Franklin Delano Roosevelt y Ronald Reagan- una vez más el pueblo de Estados Unidos encuentra la manera de aplastar el establishment.En Estados Unidos el pueblo es soberano. La noche del martes nos recordó que eso sigue siendo cierto. A pesar de los políticos, burócratas, académicos y medios de comunicación de élite, seguimos siendo un país excepcional, de libertad y oportunidad.

Newt Gingrich es ex-presidente de la Cámara de Representantes del Congreso de Estados Unidos. Artículo reproducido bajo permiso de The Americano.

http://www.semanarioatlantico.com/2010/01/23/opinion/newt-gingrich-las-lecciones-de-massachusetts.html





viernes, 7 de noviembre de 2008

El Ala Oeste de la Casa Blanca


Una de mis series favoritas que además nos aporta claves para entender el sistema político americano y ahora resulta que "Josh Lyman" era real.


"La realidad de nuevo ha superado a la ficción. Emulando a la premiada serie estadounidense 'El ala oeste de la Casa Blanca', el hombre que inspiró el personaje de Josh Lyman —ayudante del Jefe de Personal—, Rahm Emanuel, será la mano derecha del nuevo presidente de los EEUU. El congresista ya ha dado su 'ok' para ocupar el cargo de jefe de Gabinete, en lo que constituye la primera decisión importante de Obama como presidente electo..."


Continúa en el artículo:



miércoles, 5 de noviembre de 2008

Chapó

"No somos rojos o azules, somos los Estados Unidos".

"Libertad individual y unidad nacional, esos son los valores".

¿Aún alguién se pregunta por qué Obama era mi favorito?.

Recomiendo el siguiente artículo:

http://carmelojorda.blogspot.com/2008/11/obama-libertad-individual-y-unidad.html

Yes, we can

Si, si ha podido.

El sueño americano tiene a partir de hoy otro motivo para creer en él.

Varios han sido los secretos de B. Obama para ganar las elecciones:

1. Personalizar el sueño americano en él.

2. Ganar las primarias a los lobbys demócratas (los más poderosos en EE.UU.).

3. Desarrollar la mejor, hasta ahora, campaña de marketing político.

4. Articular una estructura amplia y eficaz, basada en conseguir pequeñas pero numerosas donaciones para sufragar la campaña.

5. Saber quién es, de dónde viene y hacia dónde va y conseguir que todas y cada una de las cosas que forman parte de su biografía fueran sinergias positivas.

6. Ilusionar.

Copio y pego el correo electrónico que me ha mandado B. Obama horas después de ser proclamado ganador en las presidenciales.

"Friend --

I'm about to head to Grant Park to talk to everyone gathered there, but I wanted to write to you first.

We just made history.

And I don't want you to forget how we did it.

You made history every single day during this campaign -- every day you knocked on doors, made a donation, or talked to your family, friends, and neighbors about why you believe it's time for change.

I want to thank all of you who gave your time, talent, and passion to this campaign.

We have a lot of work to do to get our country back on track, and I'll be in touch soon about what comes next.

But I want to be very clear about one thing...

All of this happened because of you.

Thank you, Barack".

Así se hacen las cosas y así se ganan las elecciones.

sábado, 7 de junio de 2008

Obama y Clinton (2)

Ha sido muy interesante seguir las primarias del Partido Democráta en EE.UU., a lo que ha ayudado bastante el seguimiento de los medios de comunicación españoles y la información a través de la WEB.

En la página web de Obama podías suscribirte y desde la organización te mandaban la información prácticamente diaria y actualizada.

Acaba de llegarme este e-mail, donde cuentan como Clinton se ha unido a la campaña de Obama.


"Hillary Clinton announced her support for our campaign today.

Senator Clinton made history over the past 16 months -- not just because she has broken barriers, but because she has inspired millions of Americans with her strength, her courage, and her commitment to causes like universal health care that make a difference in the lives of hardworking Americans.

Our party and our country are stronger because of the work she has done throughout her life, and I'm a better candidate for having had the privilege of competing with her.

Senator Clinton will be invaluable to our efforts to win in November, and I look forward to campaigning alongside her to bring this country the change it so desperately needs.

Hillary and her supporters are joining us at an urgent moment.
It's going to require a new level of commitment from every single one of us to build a national campaign in the general election.

And we're going win this election the right way -- by growing our grassroots network of ordinary people giving only what they can afford.

It's time for all of us to come together to take on John McCain in the general election. John McCain offers another four years of George Bush's policies, which our country simply cannot afford.

To win, we must continue building an unprecedented organization in all 50 states. And that will only happen if we all work together, side-by-side.

Thank you for joining this movement and supporting a new kind of politics.

Together we can do more than just win an election.

Together we can change this country, and we can change the world.


And we are honored to have Hillary Clinton at our side as we do it.

Barack".

jueves, 5 de junio de 2008

Obama candidato

Ya termino la lucha fraticida entre los democrátas estadounidenses, o eso parece, con la nominación de Obama.

Aún queda la incognida de qué hará Clinton.

En el siguiente artículo se enumeran algunas de las medidas de su programa económico.

http://www.cincodias.com/articulo/economia/ideario/economico/candidato/Obama/cdscdi/20080605cdscdieco_13/Tes/

martes, 3 de junio de 2008

Obama y Clinton

Hillary Clinton, dispuesta a ser la 'número dos' en la candidatura de Obama, informa CNN citando a AP

Según se recoge en www.elmundo.es.

Eso es lo que más me gusta de EE.UU. que los rivales luego terminan siendo compañeros.

miércoles, 26 de marzo de 2008

Teoría maquiavelica

Cuenta Ricard González en su blog en El Mundo un rumor que está surgiendo en la carrera a la Casa Blanca. Lo transcribo tal como sigue:
"Si incluso los propios asesores de Hillary Clinton han reconocido a 'The Político' que sus opciones de ser la nominada demócrata son mínimas, es lícito preguntarse, ¿por qué Hillary no se retira, como han hecho todos los aspirantes que han llegado hasta ahora a la misma conclusión?

Existen dos posibles respuestas a esta pregunta. La primera es que, por su carácter, Hillary es inasequible al desaliento. En su vida ha pasado por muchos momentos difíciles, y siempre ha salido hacia delante gracias a su tenacidad. Por lo tanto, la senadora de Nueva York se resistiría a asumir que su sueño de convertirse en la primera presidenta de la historia de los EEUU ha tocado su fin.

La segunda, un tanto maquiavélica, es que lo haría por interés propio y fruto de un frío y despiadado cálculo: cuánto más tiempo se arrastre la competición demócrata, más debilitado saldrá de ella Obama, y menos opciones tendrá de ganar en noviembre, lo que le abriría las puertas a un nuevo asalto a la Casa Blanca en el 2012.

Y es que si el senador negro es el próximo presidente de los EEUU, el sueño de Hillary estará realmente tocado de muerte. A menos que su primer mandato no fuera una catástrofe total, Obama intentaría la reelección en 2012, lo que implica que no volvería a haber primarias demócratas hasta el 2016. Entonces, Hillary tendría casi 70 años, y para muchos electores podría ser ya demasiado mayor para el cargo.

En cambio, si McCain derrota al político de Illinois en las elecciones presidenciales, habrían bastantes opciones de que Hillary fuera la presidenta el 2012. Teniendo en cuenta que McCain tendrá entonces 76 años, es probable que no se presente a la reelección. Y si lo hace, además de la edad, contará con otro handicap: el enorme cansancio de un electorado harto del esfuerzo bélico en Oriente Medio, que McCain esta dispuesto a prolongar indefinidamente. Si en este ciclo ya hay ganas de cambio, de aquí a cuatro años éstas pueden ser insoslayables. Entonces, Hillary se podrá presentar ante la ciudadanía con un mensaje del tipo: "ya os dije que ni McCain, ni Obama era la solución, esta vez, dadme una oportunidad".

Esta teoría tiene el mérito que sirve para explicar los durísimos ataques que ha lanzado el equipo de campaña de Hillary contra Obama. El otro día Bill sugirió que el aspirante negro no ama a su país, como sí lo hacen McCain y Hillary. En aquel famoso anunció del teléfono sonando a las tres de la mañana, se quiso dar la idea que Obama es un riesgo para el país. Hillary incluso llegó a decir que McCain y ella, a diferencia de Obama, han pasado el 'test' para convertirse en comandante en jefe, lo que supone cruzar una línea roja que todos los candidatos han respetado: la de considerar al candidato del otro partido mejor que a tus contrincantes y correligionarios.

Así pues, a nadie debería extrañarle que los seguidores de Hillary votaran a McCain en noviembre. Quizás temiendo este escenario, Bill Richardson hizo esta semana una llamada a Hillary para que se retirara, y en aras de la unidad del partido, pusiera fin a esta lucha intestina.

Mientras existan posibilidades, aunque mínimas, de ganar la nominación, nadie tiene el derecho de exigir a Hillary que se dé por vencida. Quién sabe si mañana puede estallar un nuevo escándalo que hunda a Obama. Ahora bien, si a Hillary le importa el bien de su partido, debería acabar con estas críticas destructivas contra Obama, y limitarse a explicar porque sus planes económico y de reforma de la sanidad son mejores que los de su rival.

Si no lo hace, y continúa esforzándose en hundir la imagen pública de Obama, la teoría maquiavélica aquí expuesta empezará a extenderse. Que no se queje entonces Hillary, una vez más de la mala uva de la prensa, nos habrá dado sobradas razones..."
Realmente creo que no es tan descabellada esta teoría maquiavelica, pero Hillary debe de controlar muy bien los resortes y poderes fácticos democratas para arriesgarse a tanto pero ¿será capaz de controlar a los votantes en 2012?.

domingo, 23 de marzo de 2008

Clinton se queda sin su presidencia

Las últimas noticias políticas que nos llegan de EE.UU. no son nada halagüeñas para la Senadora Clinton.
Desde hace varias semanas el bando republicano ha cerrado filas en torno a John McCain, político que esta experimentando una oleada de apoyo masivo y una candidatura apenas salpicada por escándalos.
En cambio, el bando democrata está sufriendo una guerra fraticida entre sus dos candidatos donde, la senadora Clinton va perdiendo cada día y en cada momento apoyos e imagen.
Desde las filas democrátas están presionando para que retire su candidatura, no quieren enfrentarse a las presidenciales con la resaca de las primarias. Es importante si quieren ganar empezar cuanto antes a unificar el partido democráta en torno a su líder y empezar a trabajar en las presidenciales, cosa que en el bando republicano ya ha empezado.
Se ha dado una vuelta a la tortilla en este proceso de primarias. Un proceso donde al principio los democratas arrancaban con mayores perspectivas de recuperar la presidencia del país pero que la llegada del potente efecto Obama enfrentandose a la maquinaria democrata de la Clinton han producido un enorme proceso de división interna que estan presurosos en finalizar.
Después de todo lo que la Senadora ha hecho, ha trabajado, ha maquinado y ha tragado durante tantos años a la sombra de su marido su ambición se va a ver truncada por el sueño americano, Obama.
Si la Senadora sigue cegada en su ambición y no renuncia, los republicanos van a llegar a las presidenciales con una gran campaña y una gran imagen, cartas muy válidas para revalidar su posición al frente de EE.UU.

jueves, 6 de marzo de 2008

Obama y la niña de Rajoy

Bueno, me ha encantado leer esta noticia. Tenía razón que era un buen gancho lo de la "niña", al final voy a tener olfato de estratéga.
"Barack Obama adopta a la niña de Rajoy para las primarias democráticas"
L D (Agencias) La famosa niña de Rajoy ha irrumpido en las primarias demócratas. El precandidato demócrata a la Casa Blanca, Barack Obama, ha hecho suyo el mismo ejemplo para ilustrar los cambios que desea para Estados Unidos de ser elegido presidente, en un discurso prácticamente igual al que Mariano Rajoy utilizó para cerrar su primer debate televisivo con Zapatero.

En su discurso pronunciado en San Antonio (Texas), tras conocer la victoria de su rival, la senadora Hillary Clinton, en las primarias de este estado y también en Ohio y Rhode Island, Obama se mostró convencido de que su victoria es posible y aprovechó para dejar claro lo que le diferencia de la ex primera dama y del ya candidato republicano a la presidencia, John McCain.

Para ello, recurrió al ejemplo de una niña inexistente con la que ilustrar cómo quiere que sea Estados Unidos si llega a la Casa Blanca. "Nosotros creemos que una niña que nazca hoy debería tener las mismas opciones independientemente de si nace en los 'barrios' de San Antonio o en los suburbios de Saint Louis, o en las calles de Chicago o en las colinas de Appalachia", comenzó su explicación.

"Nosotros creemos que cuando vaya a la escuela por primera vez, debería ser en un lugar en el que las ratas no sean más numerosas que los ordenadores, que cuando solicite el pago de la universidad no haya ninguna barrera para que logre un título que le permita competir con niños en India o niños en China para los trabajos del siglo XXI", prosiguió, en medio de los aplausos.

"También creemos que esos trabajos deberían conllevar salarios que puedan mantener a su familia, su atención sanitaria para cuando enferme, una pensión para cuando se jubile", añadió. "Creemos que cuando meta a sus hijos en la cama, debería sentirse segura sabiendo que están protegidos de las amenazas a las que nos enfrentamos por los soldados más valientes y mejor equipados del mundo, dirigidos por un comandante en jefe que tiene el juicio para saber cuándo enviarles a la batalla y en qué campo de batalla luchar", explicó.

"Y si esa niña tiene la oportunidad de viajar por el mundo y alguien le preguntara de dónde es, creemos que siempre debería ser capaz de mantener su cabeza alta con orgullo en su voz cuando responda: 'Soy americana'", avanzó en su discurso el senador por Illinois."Ese es el camino que buscamos. Ese es el cambio por el que estamos llamando. Se le puede calificar de muchas cosas, pero no se puede decir que esté vacío", remachó.
Noticia publicada en http://www.libertaddigital.com/

miércoles, 13 de febrero de 2008

Obama, la gran esperanza

Sé que es democrátra, que es estadounidense pero creo que va a cambiar la forma de hacer política.
Cuando en todos los foros se habla de la desafectación de los ciudadanos por la política aparece Obama y alcanza unas grandes cuotas de apoyo popular.
No son los ciudadanos quienes se han alejado de la política, son los políticos quienes se han alejado de la política. Han olvidado las ideologías, los sueños y las ganas de cambiar el mundo por la demagogía y la confrontación.
Una nueva generación de políticos está llegando.
Aquí recogo fragmentos de un artículo de Mario Vargas Llosa sobre Obama:
"El año pasado dicté un curso semestral en la Universidad de Georgetown, en Washington DC. La gran mayoría de mis estudiantes tenía un absoluto desinterés por la política, con excepción de tres de ellos --dos mujeres y un varón, los tres blancos-- que iban a clases con insignias del senador Barack Obama, quien en ese entonces todavía no había anunciado que se presentaría a la preselección por el Partido Demócrata de su candidato a la Presidencia. Los tres jóvenes se habían ofrecido ya como voluntarios si se confirmaba su candidatura y me los imagino ahora trabajando afanosamente entre los 9.500 voluntarios que, según leo en "Time Magazine" de esta semana, han realizado la proeza de conseguir para su candidato, a través del teléfono, las cartas y sobre todo Internet, donaciones de 32 millones y medio de dólares en el segundo trimestre de este año, es decir unos 10 millones de dólares más que las obtenidas por Hillary Clinton. Pero acaso esta ventaja no lo diga todo. Lo importante es que la suma alcanzada por Obama procede de pequeñas cantidades enviadas por unas 258 mil personas, la mayoría de medianos y pequeños ingresos, en tanto que la de la senadora neoyorquina se origina en donantes menos numerosos y de más altos ingresos.Según las encuestas, hoy Hillary Clinton ganaría la nominación demócrata a Barack Obama por 37% a 23%, pero todavía queda mucho pan por rebanar. El factor decisivo puede ser el voto negativo, que es despiadado contra la senadora --la mitad de los electores votaría por cualquiera para impedir que ella ganara-- en tanto que la hostilidad del electorado contra el senador es muy reducida y se concentra sobre todo en minorías racistas, en tanto que su radio de simpatía o no antipatía (no es lo mismo) abarca por igual amplios sectores de blancos, negros e hispanos. Todas las encuestas señalan, por ejemplo, que del 12% de votantes que respaldan a John Edwards la gran mayoría apoyaría a Obama si su candidato abandona la partida. Yo, personalmente, creo que sería muy bueno para el Partido Demócrata tener al senador como su candidato y todavía mejor para Estados Unidos si este ganara los comicios presidenciales.La razón mayor que se esgrime en contra de su elección es su falta de experiencia ejecutiva en cuestiones de gobierno. La tenía todavía menos que él John Kennedy cuando fue elegido y en su breve gestión resultó un magnífico estadista que inyectó a la sociedad estadounidense un formidable dinamismo y un contagioso idealismo a toda la generación joven. Y eso es lo que necesita a gritos Estados Unidos después de este período de mediocridad, confrontación y desgarramiento: un líder nuevo, no contaminado con la politiquería menuda, que, trascendiendo la mera coyuntura, hable con un lenguaje genuino y persuasivo de los grandes problemas y sea capaz de transmitir un mensaje de esperanza, de confianza en el sistema y en el futuro, de solidaridad con los que sobrellevan la peor parte de la sociedad de la abundancia, y que toque por igual a los estadounidenses de todas las razas, culturas y estratos económicos. Creo que ningún otro candidato, ni demócrata ni republicano, es capaz de semejante empresa, con la sola excepción de Barack Obama. Las credenciales de este y de su esposa Michelle no pueden ser mejores. Hijo de un inmigrante negro africano y de una mujer blanca de Kansas, Obama se educó en Hawái y pasó una temporada larga en Indonesia, donde vivió la experiencia de un país subdesarrollado y musulmán. Gracias a sus méritos consiguió llegar a la universidad más prestigiosa del mundo, Harvard, donde fue un alumno estrella de la Law School cuya revista dirigió (por elección de toda la escuela, donde tanto los estudiantes blancos como los de color lo apoyaron). Michelle, por su parte, nacida en una familia modesta de Illinois, consiguió también gracias a sus sobresalientes estudios ser aceptada en Princeton y en Harvard, donde se graduó con honores. Ambos se conocieron haciendo trabajo social en las comunidades marginales de Chicago, de modo que, antes de que Barack Obama iniciara su carrera propiamente política, postulando a una representación local, ya llevaban ambos varios años de trabajo comunitario, inmersos en los sectores más violentos, pobres y desesperanzados de la sociedad estadounidense. Desde que descubrí el entusiasmo de mis tres estudiantes de Georgetown por Obama, del que hasta entonces no sabía nada, he procurado seguirlo, escucharlo y leerlo. No es un político al uso, sino una personalidad singular, excepcionalmente franca y persuasiva, que evita los estereotipos y las banalidades y no vacila en ir contra la corriente en defensa de sus convicciones. Su discurso frente a la comunidad negra, sobre todo, es tan riesgoso como principista: nada de victimismos ni lloriqueos, con todas sus limitaciones el sistema es suficientemente flexible y abierto como para vencer el infortunio, progresar y alcanzar unos niveles de vida decentes. Los negros no deben perder el tiempo lamentándose por los horrores del pasado, sino remangarse las camisas y ponerse manos a la obra para erradicar los males del presente, al igual que los hispanos, los demás inmigrantes y las decenas de decenas de americanos blancos que padecen escasez, abusos o viven por debajo de sus anhelos. El "sueño americano" no es un eslogan, sino una realidad que puede sufrir recesos momentáneos, como el actual, pero puede volver a funcionar como un marco de justicia y libertad para todos si los ciudadanos invierten en ello mucho trabajo e ilusión y los gobernantes dictan leyes justas y saben hacerlas respetar. Los términos claves de su discurso son reconciliación, solidaridad, abrir más y más oportunidades para todos y emprender una lucha implacable contra la corrupción, los favoritismos, el privilegio y el abuso. El senador Obama estuvo desde un principio contra la intervención armada en Iraq, algo que es una credencial ante los votantes de izquierda, pero, sin embargo, sobre este delicado asunto se muestra ahora sumamente pragmático y prudente, pues, en vez de exigir un retiro inmediato e incondicional de las fuerzas militares estadounidenses, propone una salida gradual y correlativa a la cesión de responsabilidades a las autoridades y fuerzas militares iraquíes, a fin de evitar el caos y, sobre todo, el aniquilamiento por los fanáticos de distintos pelajes de ese amplio sector de la sociedad iraquí que apostó por la democratización y se ha visto destrozado a mansalva por los extremistas sunitas, chiitas y las distintas sectas y grupúsculos terroristas. La buena salud del sistema político estadounidense consiste en haber hecho realidad aquello que Karl Popper sostenía era el ideal de una democracia: una institucionalidad que impidiera a los gobiernos hacer mucho daño. Estados Unidos ha tenido algunos malos presidentes, cuyos desafueros dejaron dramáticas secuelas en los ámbitos económicos, sociales y morales. Pero estas consecuencias hubieran podido ser infinitamente peores si el sistema de contrapesos, balances y, sobre todo, la descentralización del poder, de sus instituciones, no hubiera servido de freno y corrección de aquellos errores. Por eso, pese a todo lo malo que se le pueda achacar --y vaya si hay un país sobre la tierra que es sometido a un escrutinio sesgado y feroz por la miríada de enemigos con que cuenta-- cada vez ha conseguido rehacerse a sí mismo desde sus raíces. Por eso sigue siendo tan próspero, libre y poderoso. Aunque no gane la nominación demócrata y por lo tanto quede fuera de la carrera presidencial, Barack Obama ha conseguido ya un logro impresionante: volatilizar aquel prejuicio según el cual pasarían muchas generaciones antes de que un negro pudiera ser elegido presidente de Estados Unidos. El interesante informe que presenta esta semana la revista "Newsweek" al respecto es concluyente. Una encuesta nacional llevada a cabo por la "Newsweek Poll", da estos sorprendentes resultados: un 92% de las personas consultadas declaran que ellas sí votarían por un negro para la presidencia y un 59% cree que el conjunto de la sociedad sí está preparada para aceptar un mandatario de color. El mensaje interracial que ha sostenido el senador Obama desde el inicio de su campaña no puede haber dado mejores frutos: pese a haber un candidato de color, la raza no va a ser un factor decisivo a la hora de votar para los ciudadanos estadounidenses en esta elección. A diferencia de lo que ocurre en otras partes, como América Latina, donde en cada consulta electoral es el sistema mismo el que se pone a prueba, en Estados Unidos, una sociedad con una capacidad autocrítica pugnaz e ilimitada, la confianza en el sistema está sin embargo profundamente arraigada en la inmensa mayoría de la colectividad y quienes lo cuestionan y quisieran erradicarlo han sido siempre minorías insignificantes, sin la menor gravitación electoral, de existencia efímera. Por eso, aunque ha padecido crisis profundas, como el crash del 29 o la era de McCarthy y la caza de brujas, Estados Unidos no ha tenido nunca dictadores y su democracia se ha autorregenerado cada vez, con ayuda de líderes sanos, idealistas e incorruptibles. Ya era hora de que una de estas figuras renovadoras de la democracia americana fuera un joven de piel oscura, salido de uno de esos bolsones sociales deprimidos y conflictivos de la sociedad, al que el sistema permitió, pese a sus taras, superar la adversidad, salir adelante y dedicar su vida a luchar para que otros millones de norteamericanos desfavorecidos pudieran seguir su ejemplo".