domingo, 29 de junio de 2008

Reflexiones sobre los cuentos

Suelo leer bastante y tengo bastantes libros pero guardo con mucho cariño y cuidado, mi primera colección de cuentos de disney. Y a pesar de que han sido la fascinación de mis hermanas y primos aún permanecen en buen estado.


De vez en cuando los vuelvo a leer y he estado pensando que en casi todos se habla de amores distintos o de dificultades distintas. Ella pobre y el rico, "La Cenicienta"; ella rica y el pobre, "La Dama y el Vagabundo"; ella guapa y el feo, "La Bella y la Bestia"; una sirena y un humano, "La Sirenita" o una india y un conquistador, "Pocahontas".


Pero de todos ellos, siempre ha habido uno que me ha llamado la atención por un detalle especial que pasa desapercibido para casi todo el mundo. En "La Bella Durmiente", Aurora tras pincharse con el huso de una rueca (dos palabras desconocidas y olvidadas si no fuera por este cuento) cayó en un profundo sueño, como así todo el palacio, durante 100 años, hasta que un príncipe lucho contra los rosales y contra Maléfica convertida en dragón a quién derroto. Después entró en el castillo, besó a Aurora, ella despertó y el cuento se acabo.



Pero, ¿nadie se ha dado cuenta de que Aurora es 100 años más vieja que el príncipe?.

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