viernes, 29 de agosto de 2008

Desde el corazón: mis lugares

Ahora que acaba ya el verano, ya estoy pensando en mi próximo viaje…London.

Pero pensando en viajar he decidido hacer una recopilación de los sitios dónde me perdería.

Lugares dónde me volvería a perder:

Tarancón: mi pueblo. No he regresado allí desde que nos mudamos a Jerez y de eso hace 18 años. Me perdería en el “bosquecillo” que veía desde mi ventana y entraría en la cueva que tanto miedo me daba de niña.



Cuenca: ya que estoy por allí una vueltecita por la ciudad que me vio nacer no estaría mal, a ver si está vez supero el miedo y cruzó el tajo.


Segóbriga: son las ruinas romanas en la que he jugado muchas veces. La primera vez que fui estaba en la barriga de mi madre.


Mesón de la Molinera, Arcos de la Frontera: dice el libro "1.000 lugares que visitar del mundo" que es uno de los pueblos más bonitos de Andalucía. Mi padre siempre ha dicho que era el pueblo más bonito del mundo, pa´eso es el suyo y el de toda mi familia. Yo me quedo con el balcón de casa de mi abuela y la suerte de que todos los agostos me pierdo allí más de una vez.
Cádiz: me gusta visitar su casco antiguo, comer y disfrutar de la ciudad tanto en verano como en invierno aunque este año he ido poco prometo perderme de vez en cuando.


Granada: es mi amor platónico. Me perdería en tantos sitios de mi Granada, me perdería en los recuerdos de mi juventud. Subir hacia la Alhambra por ese camino secreto.


Sevilla: ahora que entra la fresquita, cervezas y tapitas en cualquier lado. Suerte que vive allí mi amiga Emi y que este invierno se viene mi Gustavo (uno de mis mejores amigos). Este año aún me perderé más por allí.


Madrid: otro de los lugares de mi infancia, cualquier sitio es bueno ya lo dice la canción…pongamos que hablo de Madrid.



Barcelona: impresionante la Barcelona de Gaudí (mi artista preferido), Montjuic y las risas con mi tío o las tapas por el Barrio Gótico. Imprescindible de vez en cuando. ¡Ah! y cafelito o lo que sea con el “franki” (otro de mis mejores amigos).



Santiago: como se puede beber y comer tan bien y tan barato. Otra misa del peregrino, por favor, y cualquier siestecita en el campo gallego.


Salamanca: en invierno para volver a ver el ambiente estudiantil y pasar frio del bueno, del seco, del castellano.


Milán, Verona y Venecia: fui de viaje a Italia de regalo de comunión. Viaje barato y en familia, en coche hasta el norte de Italia, pasando por los Alpes, y alojamiento en una casa en un pueblo pequeño (San Gregorio) en casa de unos amigos italianos de mis padres. De los mejores recuerdos de pequeña. Y se me cayó un abanico a las aguas de Venecia que recuperaron dos gondoleros; dice el dicho que al que se le cae algo en aguas de Venecia y lo recupera, volverá a Venecia. No pierdo la esperanza.


Irlanda, Dublín, Galway… Castillo de Ashford: algún año gastaré mi agosto en recorrer en coche toda la isla pero volviendo a mis lugares, en especial, el Castillo de Ashford; pasión que tengo por los castillos.



Lugares dónde espero perderme algún día:
San Sebastián: dicen que es la ciudad más bonita de España y la playa de la concha imprescindible.


Asturias: decidido, el año que viene en agosto, casa rural con actividades en Asturias que aquí hace mucho calor y allí un clima estupendo.


London: es increíble que aún no conozca London. Me gustan el cine inglés, la música inglesa, sus calles, su metro y todo, sin conocerlo. En diciembre me espera.


La Toscana, Florencia y Roma: fui a Italia pero no pise ninguno de estos tres lugares. La Toscana porque aún sueño con enamorarme de un toscano; Florencia y el síndrome de Stendhal y Roma, las catacumbas, el circo, las siete colinas y las vespas. Y los italianos descarados diciendo piropos.



Atenas o cualquier isla griega: curiosidad por el mundo antiguo, allí nacieron las polis y por ende, la política.



Mercadillos navideños alemanes: dicen que es espectacular, habrá que ir a verlo. También dicen que no me puedo perder cualquiera de sus Castillos.


New York y Washington: indudablemente el cine americano ayuda mucho pero también la idea de que si algún día me dedicó al asesoramiento político, la mejor escuela es EE.UU.


New Orleans a Nueva Zelanda: siempre pensé que mi “viaje de novios” sería a New Orleans, después del Katrina la ciudad no es la misma, así que a Nueva Zelanda, a perderme por sus paisajes pero vamos será mi “viaje de no-novios” que lo de casarse ya no se lleva.


Argentina: aún no sé si La Pampa o la Tierra de Fuego. De todas formas, es el más improbable de mis viajes.



Lugar dónde me pierdo:

Jerez: es mi ciudad, dónde vivo, dónde y por la que trabajo, dónde está mi gente, dónde el aire me huele a felicidad.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Lidia te leo de vez en cuando y esta recopilación de lugares por visitar me ha encantado.
Denota mucha inquietud en sentido positivo.

Te deseo vayas logrando cumplir con esos objetivos y que yo lea como cuentas las experiencias.

un cordial saludo de M.b.

Lidia Menacho Romero dijo...

Muchas gracias.

Espero que las inquietudes no se me acaben nunca porque entonces será señal de que no estoy viva.

La vida es muy larga y viajar es un verdadero placer así que espero visitar al menos muchos de estos lugares.

Un saludo.