martes, 26 de febrero de 2008

La gran noche de Mariano Rajoy

Mientras me vence el sueño o para vencerlo, quiero dejar constancia en este blog de la extraordinaria impresión intelectual y política que me ha producido el debate o, para ser precisos, la actuación de Mariano Rajoy frente a Zapatero.
La derecha política, que no suele dar más que disgustos a la derecha intelectual y a su base social, nos ofreció ayer uno de los mejores momentos de comunión emotiva, ideológica y nacional en toda la historia de la democracia española. Por supuesto, Rajoy puede perder las elecciones el 9-M, pero no perderá ni un solo voto de los que ya tenía y ganará muchos entre los que dudaban ante un liderazgo no todo lo contundente y claro que deseamos.

Por supuesto, desconozco si Rajoy ha ganado las elecciones en la noche del 26 de Febrero, mucho me extrañaría, pero estoy seguro de que ha ganado la continuidad en el PP y del PP. Rajoy, si gobierna, lo hará para todos los españoles, no tengo duda de ello, pero ha empezado por donde hay que empezar y por donde suelen fallar los líderes de la Derecha, que es respetar y hacer respetar a quienes representan. Y eso lo ha hecho maravillosamente. Ha estado tan bien que a veces no parecía ni Rajoy ni del PP, y sin embargo esa es la capacidad real del líder de la primera fuerza política española.
Si de esta noche saliera un PP dispuesto a comerse con patatas, e incluso sin ellas, a quienes le quieren desterrar de la vida pública, y con él a diez millones de españoles, sería coherente con lo que hemos visto. Y si no sale, hay que sacarlo a caponazos, porque tener esa potencialidad, ese discurso, esa capacidad dialéctica que Rajoy exhibió ante ZP y no utilizarla a fondo para enderezar los entuertos de los malandrines sociatas no tiene perdón. En todo superó Rajoy a Zapatero, incluso en cursilería, con la niña esa del globito que sacó al final y cuya venturosa andanza vital tuvo que leer porque nadie en su sano juicio podría reproducir esa gansada de memoria. Pero eso fue una manchita al final, una rozadura en una armadura impecable tras vencer en el torneo más difícil del Reino. La nación, la educación, el terrorismo y sus víctimas, la inmigración, la seguridad, la vivienda, la familia, la libertad y otra vez la Nación, que todas las veces son pocas para recordarla, fueron los pilares argumentales desde los que bombardeó y demolió el liderazgo del presidente más siniestro de la historia de España.

Como dije en LDTV nada más terminar el debate, no hay una sola cosa dicha por Mariano en la que no me haya visto representado. Y más importante aún: no hay una sola por la que me sintiera ofendido o me llevara a dejar de votarle. Casi todo es mejorable, pero también empeorable. Y es muy difícil que Mariano Rajoy tenga una noche tan grande como ésta. Las encuestas dirán lo que digan y en las urnas ganará quien gane, pero ese es el partido político que media España sostiene y se merece, aunque no siempre la criatura esté a la altura de la mamá. Esta vez, sí. Gracias, Mariano.
Artículo extraído del blog de Federico Jimenez Losantos.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Ya sé que debo escribir sobre el artículo, pero cómo le voy a llevar la contraria a Jiménez los Santos. De todas maneras diré algo.
En mi opinión es mejorable y bastante la imagen que dio Rajoy en el debate.
Cierto que tuvo un discurso acertado en cuanto al fondo, pero también creo que podría haber aprovechado algunas oportunidades que le dio el candidato socialista para dejarlo en ridículo, o hacerle tragar sus propias palabras (ejemplo, explicar que el motivo de no subirle a los funcionarios el salario al principio del mandato de Aznar fue simplemente poder llegar a cumplir los criterios de Maastricht; o pararle los pies en alguna de las intromisiones que Zapatero hizo continuamente en el turno de Rajoy ; y otras cosas que ahora mientras escribo no recuerdo).
Respecto a la imagen, hay que tener ser un poco críticos, en el inicio Rajoy no reflejaba tranquilidad, sino todo lo contrario, no se le veía cómodo y eso se notaba en el hecho de que no sabía como estar mientras permanecía en pie. En la presentación que se hizo ante los fotógrafos, en la que parecían dos púgiles antes de un combate, Zapatero parecía un pincel, mientras que Rajoy parecía que había llegado corriendo, tenía la pinta de alguien que solo se pone traje en contadas ocasiones, los pantalones a la altura de la cadera, en lugar de en la cintura, la chaqueta abierta en lugar de cerrada que es como debe de estar mientras se está de pie. En la introducción del debate, estuvo leyendo durante toda la presentación; en mi opinión debía de haberse aprendido el texto, tres minutos no es nada y en el relato de la niña, pues igual, lo debió decir de memoria. Durante el transcurso del debate, o no le dijeron donde debía mirar y no lo sabía o lo que es peor, tiene un tic grave en el ojo, que se lo desvía hacia la izquierda; no sabía qué hacer con las manos, que en algún momento, llego a ponérselas mientras hablaba a la altura de la cara, ya tiene suficiente barba como para que encima quiera taparse la boca con las manos; aparte en la mesa llegó a tener un tocho de papeles enorme, hay una imagen en que los coge con cierto desorden, en una ponencia, los papeles y chuletillas deben estar totalmente en un segundo plano, que se noten lo mínimo sino se da imagen de no tener claras las cosas; y para acabar una vez que se empezó a sentirse cómodo, no corrigió gestos como sonrisitas y otros ciertos movimientos faciales que sólo dan mala imagen porque no iban cargados de ningún significado.
En general, no tuvo una actitud agresiva contra el candidato socialista, en lugar de increparle, preguntaba con una ridícula entonación que daba señal de falsedad acabada con una sonrisita que en mi opinión parecía que decía "¡te pille!" y esperaba la aceptación del entorno, y menos mal que corrigió algo ese humor irónico característico de Rajoy que no lo entiende casi nadie. En conclusión, debería cuidar su imagen, la presentación, y aprender algunas nociones de arte dramático que no le vendrán de más para el próximo debate.
Y ya para acabar, quisiera criticar la entrevista suave que le han hecho a Zapatero en la sexta, la entrevistadora, no ha hecho más que poner en suerte a cada pregunta para deleite y disfrute del entrevistado. Está claro, para eso se creó su propia cadena, para que en momentos de debilitamiento como el que sufrió ayer en el debate se permita el lujo de poder reforzar su imagen.
En mi opinión esto roza la ilegalidad, pues está utilizando medios de difusión públicos en tiempo de campaña. Y creo que es materia regulada por la Ley Electoral General con la intención de que no haya diferencia en la cantidad de propaganda electoral de cada partido a través de la televisión.
De esta manera ZP no se somete a esos tiempos gratuitos establecidos para los distintos partidos. Me parece injusto.
Y ya de lo último que me he enterado es que se ha permitido que el 8 de marzo, el día de la jornada de reflexión, haya una manifestación por el día de la mujer. No estoy en contra del día de la mujer, pero si estoy en contra de utilizar la jornada de reflexión como un día más de campaña ya se toman por costumbre, lo hicieron en las anteriores elecciones y lo repiten ahora. Dejen que la política se tome el único descanso que se toma cada 4 años.
JRBL

Lidia Menacho Romero dijo...

La verdad es que te has hecho de rogar pero ha merecido la pena.
Mi profesor de Ciencias de la Administración repetía que "uno cuando entra en una organización suspende sus facultades críticas". Es muy problable que me este pasando, lo lamento pero...
Ahora quizás si hay algunas de las afirmaciones que haces que comparto, pero me gusto mucho su discurso aunque se que en televisión cuenta más el "arte dramático" que los argumentos. El director del master me lo repite bastante.
Muchas gracias.

Lidia Menacho Romero dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
borjabrela dijo...

Permitanme que enlace esta entrada del blog con el mio (abrevaderos.blogspot.com), y que copie el comentario de JRBL (al que creo conocer). Estoy muy de acuerdo con el y ha expresado exactamente lo que pienso. Rajoy debe y podria demostrar a los espannoles el error que supone votar a Zapatero pero tiene que mejorar. En materia audiovisual y de mercadotecnia, el PP debe aprender mucho todavia.